¿Conoce el Puente del Gard? Verdadero tesoro de la Antigüedad, es uno de los monumentos más emblemáticos de Francia. Si quiere verlo de cerca, haga una visita guiada. Le sorprenderá lo bien conservado que está este edificio de la época romana.
Puente del Gard: un edificio romano intemporal
El Puente del Gard es una joya de la arquitectura antigua, que se alza majestuoso en medio del paisaje provenzal. Este acueducto romano, construido en el siglo I d.C., es un extraordinario testimonio del ingenio romano. Con una altura de 48,8 metros sobre el río Gardon, es la estructura de este tipo más alta del mundo.
El objetivo de esta estructura era abastecer de agua a la ciudad de Nîmes, situada a unos 50 km. Esta proeza técnica garantizó el abastecimiento de agua de la ciudad durante varios siglos.
Su excepcional estado de conservación le ha valido ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Un lugar mágico, donde el pasado y el presente se encuentran, que le llenará de asombro.
Justo al lado de esta impresionante estructura se encuentra el Museo del Puente del Gard. Inaugurado en 2000, este museo moderno e interactivo le sumerge en la historia de la construcción del puente.
También es posible bañarse en el Gard. De hecho, en verano, muchos turistas aparcan sus coches, no pagan entrada y aprovechan la vista única del edificio.
Lo más destacado de la visita al Puente del Gard
- La excepcional conservación del edificio
- El idílico entorno natural del lugar
- Museo del Puente del Gard, una inmersión en la historia romana
- Las numerosas rutas de senderismo alrededor del puente
- Espectáculos nocturnos «Luminessences du Pont du Gard» en verano
- Nadando al pie del puente.
Desventajas de visitar el Puente del Gard
- Tarifas (sobre todo de aparcamiento)
- Muchos veraneantes
¿Qué se puede ver en el Puente del Gard?
Además de admirar el acueducto en sí, la visita al Puente del Gard ofrece un amplio abanico de actividades.
En el Museo del Puente del Gard, descubrirá un mundo de exposiciones dedicadas a la historia romana y a la ingeniería hidráulica antigua. La exposición permanente, compuesta por varios espacios temáticos, le mostrará cómo los romanos afrontaron el monumental reto de construir el acueducto y cómo lo utilizaron para transportar agua a lo largo de muchos kilómetros.
Las exposiciones temporales exploran diversos aspectos del mundo romano y del patrimonio local.
Al aire libre, un paseo por las rutas de senderismo que rodean el Pont du Gard permite apreciar plenamente el lugar en su entorno natural. En particular, puede recorrer el sendero Mémoires de Garrigue.
En verano, no se pierda el espectáculo Pont du Gard Luminessences. Se trata de una impresionante proyección de luz sobre el puente, que recorre su historia.
Por último, los más aventureros pueden probar a navegar en kayak por el Gardon para acercarse aún más al yacimiento.
¿Cuánto cuesta entrar en el Puente del Gard?
Aparcar cerca del puente cuesta 9 euros al día. Acercarse, fotografiar y bañarse es gratis. Las visitas adicionales son de pago.
La entrada al museo cuesta 6,50 euros. Es gratuita para los niños.
También se ofrecen visitas guiadas muy interesantes en francés e inglés. Duran una hora. Cuestan 15 euros.
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¿Cuánto dura una visita al Puente del Gard?
Una visita completa del Pont du Gard, incluyendo el museo, las rutas de senderismo y el tiempo para admirar el acueducto, puede durar varias horas. Dedique al menos medio día para aprovechar al máximo todas las facetas de este lugar excepcional.
¿Dónde está el Puente del Gard?
Le Pont se encuentra en la siguiente dirección: 30210 Vers-Pont-du-Gard.
¿Cómo llegar al Puente del Gard?
Si viaja en coche, el Pont du Gard es fácilmente accesible por la autopista A9, salida Remoulins, después siga la D981 y la D19.
Para los que prefieran el transporte público, varias líneas de autobús llegan al lugar desde Aviñón, Nîmes y Uzès. También puede tomar un tren hasta Aviñón o Nîmes, y después un autobús hasta el Puente del Gard.
¿Cuál es el horario de apertura del Puente del Gard?
El acceso al recinto y a los aparcamientos es posible todos los días del año de 8.00 a 0.00 horas.
Los espacios culturales, como el museo, están abiertos:
- De 9.00 a 17.00 horas De noviembre a febrero
- De 9.00 a 18.00 h. en marzo y octubre
- De 9.00 a 19.00 horas en abril, mayo, junio y septiembre
- De 9 a 20 h en julio y agosto.
Mi opinión sobre el Pont du Gard: una visita fantástica, ¡pero muchos turistas!
La verdad es que tenía muchas ganas de visitar el Puente del Gard. Llevaba tanto tiempo oyendo hablar de él o viéndolo en la tele que me moría de ganas de verlo con mis propios ojos. Y debo decir que no me decepcionó.
La visita guiada fue lo más destacado. El guía era muy erudito y apasionado, y mantuvo mi atención de principio a fin. Hizo que la historia del Puente del Gard cobrara vida, como si nos transportáramos a la época romana. Las anécdotas que compartió fueron interesantes y añadieron una capa extra a la experiencia en general.
El Museo del Puente del Gard fue otra agradable sorpresa. Me lo pasé muy bien allí, descubriendo los secretos de la construcción del puente y el ingenio hidráulico romano. Las exposiciones eran interactivas y bien pensadas, y aprecié especialmente los modelos en 3D, que me permitieron comprender mejor el funcionamiento del acueducto.
Sin embargo, si tengo que hacer una crítica, es por supuesto el precio del aparcamiento. 9€ por unas horas en medio de la nada es caro.
En cuanto al baño en el Gardon, no me arriesgué. Había mucha gente y mucho ruido, lo que me desanimó un poco. Imagino que entre semana o fuera de temporada, la experiencia debe ser más agradable.
En conclusión, la visita al Puente del Gard es obligada si se está de paso por la región. El lugar es majestuoso, la visita guiada fascinante y el museo muy instructivo. A pesar del coste del aparcamiento y de las aglomeraciones al borde del agua, me encantó.
¿Qué más se puede hacer cerca del Puente del Gard?
Más allá del Pont du Gard, la región está llena de maravillas por descubrir. Aquí tiene algunas sugerencias para completar su visita:
- Explorar la encantadora ciudad medieval de Uzès
- Visita el Museo Haribo para gourmets
- Descubrir el castillo de Castillon y sus jardines
- Pasee por el mercado de Uzès, uno de los más bellos de la Provenza
- Excursión en canoa por el río Gardon
- Visitar la catedral de Saint-Théodorit y su torre Fenestrelle en Uzès
- Regálese una cata de vinos en una de las bodegas cercanas
- Sumérjase en la naturaleza en el Parque Natural Regional de los Alpilles
- Descubra la artesanía local en los talleres de alfareros de Saint-Quentin-la-Poterie.
Como bloguera profesional, aprovecho mi horario flexible para viajar mucho. No he estado en todas partes, ¡pero está en mi lista!